“Vieja” sufrida

hace un par de meses pedían la “cabeza” de Mario Mandzukic, a quien lo tildaban de acabado. Esos mismos hinchas que ya no lo querían ver más en Turín ayer festejaron el agónico gol (84’) del croata al Sporting Lisboa, que significó una victoria clave para las aspiraciones del gigante italiano.

Las “Cebras”, que comparten grupo con el cuadro blaugrana, pudo remontar un partido que pintaba para empate. El primer baldazo de agua fría cayó a los 12 minutos, tras autogol del brasileño Alex Sandro.

El brasileño adelantó para la visita luego de anotar en propia puerta en una jugada fortuita. Gelson Martins disparó en la humanidad de Gianluigi Buffon, que dio rebote y este terminó al fondo tras chocar en el lateral.

El conjunto de Massimiliano Allegri encontró la paridad por medio de Miralem Pjanić, quien marcó un golazo de tiro libre a los 29 minutos. El bosnio sumó su tercer festejo de falta directa en la Champions League.

Cuando parecía que ambas escuadras se iban a repartir los puntos apareció Mandzukic. El delantero la clavó bajo los tres palos con un soberbio testazo. Ante la inoperancia de Higuaín y Dybala, apareció el croata.

De esa forma, la “Juve” sumó seis puntos y amenaza al Barcelona con arrebatarle el primer luga del Grupo D cuando aún restan tres fechas. •