DTP_23_PICHANGUERO

ES HORA DE DISPARAR... Qué tal causitas. Y tuto el país amaneció ayer recontra feliz. Parecía un festejo posnavidad o Año Nuevo, con la gente abrazada y algunos celebrando de corrido, pero con la diferencia que la gran mayoría vestía la sagrada Blanquirroja. Es que no fue un día cualquiera, pues con la clasificación a Rusia la gente se desbordó en los festejos, más aun con el feriado que dio el gobierno. Gózalo mi Perú lindo y querido, que hace rato te merecías una alegría así. Así arrancamos con las últimas de nuestra pelotita...

La Foquita celebró el triunfazo hasta altas horas, merecido porque se logró el objetivo, sin embargo no faltó un enfermo que confundió el hinchaje por su club con el festejo de todo un país y lo agredió a la salida del local en el que estaba. Obviamente el pelotero reaccionó y hasta el alumno de la Urraca lo defendió, aunque en el caso de éste se sube al coche porque sabe que ahora la selección vende. ¡Vestecon!

El Depredador tiene el apoyo de todos por el aporte que dio a la clasificación, pero lamentablemente la tía Peta se equivocó al pitear porque fue a visitar a la sele horas previas al partido y nadie la recibió. Lo normal es que nada rompa la concentración de los muchachos, más si al grupo le costó dejar a un lado el tema de la suspensión de su hijo y reavivar la situación en ese instante no era apropiado. ¡Sí, señores!

La situación de Manuel Burla se complica, ya que en pleno juicio hizo una seña de cortarle el pescuezo a un testigo que declaraba en su contra y la jueza lo tomó como una amenaza, por lo que optó por restringirle la libertad de la que gozaba y ahora se encuentra con arresto domiciliario. El tío anda tiki tiki, pues le cantaron que podría estar en Canadá veinte años al igual que otros dires de la Conmebol. ¡Rexuxa!

BUENO MI GENTE, soy fuga. Mañana vuelvo con fuerza. ¡ARRIBA PERÚ!