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José Carlos Fernández tuvo la despedida que tantas veces soñó, con la hinchada rendida a sus pies y el gol de cabeza como su sello personal.En frente, irónicamente tuvo a Melgar que se tiñe de rojo y negro, los mismos colores de Newell’s, su futuro equipo en la Argentina.

El triunfo ante Melgar no fue fácil, pero todo estaba dado, por el planteamiento y los hombres que utilizó Gustavo Costas para que “Zlatan” se fuera con gol.Pero ello recién se produjo en el segundo tiempo, cuando el argentino envió a Donny Neyra, quien siempre trata a la pelota con cariño.Otra vez se convirtió en figura e hizo lo que ni Trujillo ni Hurtado lograron a pesar de su buen despliegue. Puso pases de gol y le devolvió a los íntimos protagonismo ofensivo.Melgar no fue una pera en dulce. Presionó, tuvo buena presencia en ataque, pero se vino abajo cuando Rivero rompió en llanto al salir lesionado.Allí nomás Alianza despertó llegando por los lados, con un Uribe inspirado tratando incluso de poner el primero. Si en la fecha anterior, Fleitas cometió un penal, ahora se la cobró generando uno que Quinteros facturó bien.Libman le sacó un disparo venenoso a Meza Cuadra, lo cual dice que el “dominó” nunca bajó los brazos.La manija del cotejo volvió a manos del local con el respiro que dio el ingreso de la pareja Neyra-Joel Sánchez. Se estuvo cerca del tercer gol, pero no se liquidó y acá hay un severo llamado de atención porque Valdez puso el descuento y lo que pudo ser una despedida espectacular, casi se termina en un paño de lágrimas.

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