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Jefferson Farfán: Ahora solo queda levantarse, no hay espacio para los lamentos

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Jefferson Farfán se olvidó del desgarro en el muslo derecho y se quitó la casaca para ingresar.“¿Estás seguro?”, le preguntó por última vez Sergio Markarián y la “Foquita” le volvió a decir “sí”. Hacía rato que la gente, con insultos de por medio, le pidió su ingreso al uruguayo.

“Tenía que ingresar. Era difícil verlo desde fuera. Obviamente me sentía incómodo por el dolor, pero intenté hacer mi juego. Lamentablemente, ya no habían espacios”, señaló el volante del Schalke 04.

En el campo, Farfán fue intrascendente. Ni siquiera se produjo el golpe anímico que buscaba Markarián con su ingreso en lugar de André Carrillo. Jefferson hizo lo que pudo.“No voy a negar que tuve temor, pero había que arriesgar. Ojalá pueda tener más tiempo ante Uruguay”, precisó “Jeffri”, quien no oculta su bronca por la derrota ante los “cafeteros”.“Dominamos todo el partido y desperdiciamos las oportunidades más claras. Eso al final fue lo que nos echó a perder todo. Ahora solo queda levantarse, no hay espacio para los lamentos”, señaló Farfán, quien intercambió camiseta con el lateral “colocho” Pablo Armero.EN EL BANCODe otro lado, está casi confirmada la presencia de Jefferson Farfán en el banco de suplentes para el duelo en el Centenario. La “Foquita” sigue mal, pero su lesión no empeoró con su participación en el encuentro. 

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