¡“Mostro” marino!

HACE UN AÑO, Gabriel Villarán sufrió una dura lesión. Corriendo en Pipeline, Hawái, una ola le cayó encima y le aplastó la pierna izquierda contra la tabla. Tuvo que ser rescatado y operado de emergencia en la isla. Una barra de metal para juntar las partes del hueso partido y varios clavos fueron el resultado de la cirugía.

Tras varios meses de rehabilitación, el tablista peruano regresó al mar y este 2018 lo inició con motivación en Hawai.

El “Cabezón” estuvo en la costa norte de Maui, lugar donde se encuentra la famosa rompiente de Jaws. Olas monstruosas y peligrosas caracterizan el lugar. “Este ha sido mi primer viaje a Hawái después de la lesión. Estuve nervioso, con un poco de miedo y mucha ansiedad, pero nunca dudé en venir a esta crecida”, nos dijo.

Las condiciones en Jaws estuvieron perfectas: olas de gran tamaño y poco viento. Y demostrando ser un especialista en ola grande, Gabriel dejó atrás sus temores y se aventuró a correrla, sin imaginarse lo que venía. “He corrido la ola más grande de mi vida y me atrevería a decir que es la ola más grande que cualquier peruano haya agarrado remando en Jaws”.

Toda la felicidad que uno puede imaginarse resumido en los 15 segundos de duración de la ola de al menos 14 metros de altura. ¡Crack!•