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El dedo en la llaga

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¿Quién podría imaginar que el perfecto Kobe Bryant tiene un punto débil? Así es, la megaestrella de la NBA y candidato a ser considerado el mejor jugador de todos los tiempos, tiene un secreto en lo que se refiere al deporte de las canastas.

El líder de Los Ángeles Lakers ha reconocido una carencia técnica fundamental en el control del balón. No puede girar el balón sobre su dedo, aquella acción muy característica que nos hace recordar las pericias de los Globetrotters.

Por culpa de una lesión que sufrió hace tres temporadas, Bryant no puede usar su índice para hacer rotar la pelota.

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