Soldado de la patria

Quizás en el preludio de sus verdades acepte que Deportivo Quito no sea el club soñado, pero “Zlatan” juega con el corazón en la mano, como si disputase la final de la Champions, con esa fidelidad que lo impulsa a dominar incluso los 2,850 metros de altitud de una ciudad tranquila, pero fría y donde se come menestras hasta con pan.

-Nunca te vimos definir con tanta fiereza, ¿qué pasó?-Es que Leao (Butrón) estuvo genial en varias pelotas de gol que me barajó, pero esa tenía que meterla con todo. No te imaginas la felicidad que sentí cuando escuché el grito de la gente. Corrí con la imagen de mi esposa, de mis padres, de mis compañeros de banca y de los hinchas que me apoyaron hasta en final. Fue un momento espectacular.-¿Y te fijaste en la desazón de tus compatriotas?-Fue bastante raro anotarle a la San Martín con la camiseta de un equipo que no es de tu país. Pero esto es fútbol. Es difícil llegar a un club y ser titular después de cuatro días. Pero le agradezco al profesor (Insúa) por la fe que me tiene.-Pocos te perdonarán si eliminas a la San Martín...-Es una lástima, pero es mi trabajo.-¿Y la barra ya te agarró “camote”?-Es una de las más populares, no es tan grande como la de LDU, pero ya tengo algunos cánticos que me hacen recordar a la de Alianza.-Cuando llegaste, ¿quién te recibió?-Tuve un caluroso recibimiento de parte de los ecuatorianos Tenorio, Hurtado e Ibarra. Ellos fueron mundialista y espero aprender de sus experiencias. Además, estoy siempre con Juan Diego (Gonzales Vigil) porque vivimos en el mismo departamento y nos apoyamos mutuamente.-¿Y se extraña la sazón de la comida peruana?-Sobre todo el cebiche porque aquí lo hacen distinto, menos picante. Comen raro y todo lo acompañan con chifles, pop corn y menestras.-¿Estás listo para recibir al profesor Markarián?-Ojalá que se dé una vueltita por Ecuador, así podremos tomarnos un café y aprender de sus experiencias.-A ver, cuéntanos algunos de tus sueños...-Jugar ante Canadá y Guatemala. Ser la pareja de ataque de Claudio Pizarro, a quien admiro por sus logros en Europa.-¿Y qué te falta para alcanzar esas metas?-Me parece que los goles que anote aquí me llevarán a la selección. Reconozco que hay delanteros que juegan en ligas más competitivas que yo, pero soy un luchador y eso lo tiene que saber el profesor. Además, sé que me siguió en la Copa Libertadores.-Se habló de que te irías a Italia, ¿eso tiene asidero?-Sí, hubo dos opciones: Lazio y Torino. Pero no tenía el pasaporte italiano, pero mi empresario me ha comunicado que se mantienen vigentes estas opciones.