Se quedó en el aire

Glasgow, Escocia

Quizá marcar su primer gol como padre no fue con el resultado que él habría querido. El astro argentino Lionel Messi descontó en la derrota del Barcelona (2-1) de visita ante Celtic, que le costó el invicto en la Champions League. 

Leo se guardó por segunda vez el chupón para darle la bienvenida a Thiago, cuya celebración, tras el derechazo inatajable en tiempo de descuento (91’), simplemente fue llevarse el dedo a la boca ante la derrota en tierras escocesas.

Pareció que todo estuvo en su contra, un remate al travesaño le negó la posibilidad cuando el resultado aún podría ser remontable.

El rival jugó un partido inteligente y lo definió en momentos claves. Primero, Víctor Wanyama (20’) adelantó, impulsado por el espectacular aliento de su público. 

Luego, con un Barcelona volcado en ataque, un pelotazo a poco del final. Tony Watt (83’) sentenció el extraño duelo.

Sin embargo, hubo reacción azulgrana en los pies del papá de Thiago Messi, pero solo pudo ser para el descuento. 

“El gol no sirvió para ganar pero quedan muchos otros para poderle dedicar más goles a Thiago”, indicó la “Pulga” claramente triste tras la derrota en Glasgow y pensando en su revancha este sábado ante Mallorca por la Liga española.