Apenas una mueca

Marycielo Alva

potencia, toque, velocidad, asociación... Gabriel Costa es esa clase de volante ofensivo que rinde silenciosamente. El que se asocia. No suele ser el rostro protagonista que vemos tras el gol, pero deja huella en cada uno de ellos.

El Gabriel Costa versión 2018 ha evolucionado de tal forma que su presencia es imprescindible para el gol. Aportó directamente en el segundo tanto de Emanuel Herrera generando el penal que luego el “9” ejecutó. Además de un tiro libre bien pateado que quitó la respiración al golero Andrada, pero que el palo se la devolvió.

“Gaby” fue acertado en más del 70% de sus pases. Un porcentaje ya habitual para el uruguayo nacionalizado peruano. El nivel del rival esta vez le hizo olvidarse de sus dotes como goleador para aportar con pases en el frente de ataque.

Sin duda, querrá desquitarse el 7 de marzo en el Estadio Nacional, cuando Lanús llegue a Lima para la revancha. Aún quedan 90’ más.•