Para su bronca

El clásico tuvo un final picante. Esta vez el delantero de la “U” Carlos Orejuela se robó el show junto al arquero aliancista Salomón Libman. ¿Qué pasó? Al final del lance, Libman trató de ser irónico con Orejuela.

Se le acercó para darle la mano con una sonrisa, pero el delantero lo tomó de mala manera y luego de mentarle la madre le aplicó una fuerte patada desatando la gresca.El comando técnico íntimo se metió para separarlos, al igual que Toñito Gonzales, quien se unió para tratar de calmar las aguas.“Una cosa es que vengan, nos ganen y se vayan, pero no acepto que se burlen en mi cara”, gritó Orejuela.A su vez, Libman comentó: “Decidí darle la mano. Antes él me hizo lo mismo, pero ahora se picó. Me mentó la madre y por eso reaccioné. Él sabe dónde vivo y que me busque. Fuera del campo no es valiente”.En otra escena, “Zlatan” Fernández y Galván también se lanzaron insultos y casi se agreden. Felizmente los separaron porque el delantero se olvidó que el “Negro” le rompió el cráneo a Fleitas.