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Perdónalo, Mago

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En el fútbol, en el ajedrez y en la vida no hay lugar para los débiles. En un estadio extremadamente grande para la minúscula afición que congrega en sus noches de fútbol mal jugado, la “U” derrotó por 2-1 a un CNI valiente y agresivo.

Minuto 83. El tiempo quemaba y en el tablero se producía una batalla de fuerzas disparejas cuando de pronto un tiro libre ejecutado por Johan Vásquez le permitió al “Negro” Galván meter una bola de fuego a la garganta del área que John Galliquio cabeceó.El arquero Dituro no pudo controlar el testarazo de “Tyson” y la “U” selló el triunfo. Premio al esfuerzo del zaguero, quien luego de ser echado de la selección por romper la disciplina en Panamá carga el peso de sus culpas y las de otros.En el minuto 9, el zaguero Marcelo Zamora había aprovechado un error de la defensa merengue y con un oportuno cabezazo anotó el gol de la visita. Entonces, la garra empezó a fluir sin el estilo de antaño.La angustia de “Chemo” encontró remedio en el bonito gol de Rainer Torres a los 24’. El “pulmón” del mediocampo recogió un error del pequeño Barrena, se sacó de encima a cuatro rivales y con un puntazo, a lo Romario, clavó el empate.En la segunda etapa, la noche oscureció las ideas en la “U”. Una lluvia de centros al área del CNI, buscando la cabeza milagrosa de un fantasma, entorpeció el juego de los cremas, devastados por los minutos que avanzaron a ritmo de locomotora.Parecía que la selva, con sus ríos y su gente caliente, se tragaba al costeño de mediocre accionar, pero el milagro se le hizo a Galliquio y la “U” ganó, y aún mantiene el sueño de clasificar a un torneo internacional.

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