Quemó cerebro

Su feroz gambeta que pone en aprietos a las más férreas defensas no pudo encenderse en Trujillo porque le pusieron freno. André Carrillo en su inagotable intento por anotar ante los poetas terminó cansado sufriendo por el concierto de piernas de los zagueros.

Carrillo fue un dolor de cabeza para los locales que le tomaron el pulso para no perderle pisada. Sin embargo, exigió en diversas ocasiones al golero Daniel Ferreyra, que le quitó la etiqueta de gol con sus elásticas intervenciones.

Primero a los 7’ del PT en una buena acción personal dominó el balón al borde del área y de volea intentó sorprender al meta trujillano que desvió el remate que se incrustaba en su pórtico. Luego en sociedad con Paolo Hurtado se paseaban conla defensa norteña.

No obstante, el campo sintético parece haberle pasado factura a la “Culebra” porque en la segunda parte se apagó y tuvo que ser reemplazado por Alexander Sánchez a los 19’ para guardarlo para el clásico de la próxima jornada.