Hizo el Gas...to

Si hace semanas algunos dilemas surgieron por  sostener arcas económicas deterioradas, ayer más de un paladín de armadura guinda olvidó el pasado y se atrevió, con hilos y agujas en mano, a  zurcir por el derecho aquel  escudo en forma de “U” que está  tatuado en la mitad más uno del país.  

Sí, hincha crema - el  de  ayer de Odriozola y hoy del Perú - Universitario rescató con el corazón en la  boca, con  el alma de once guerreros que corrían, y a veces  trotaban, y con aquella  insignia  de una  “garra” que algunos en el “compadre” miran celosos, un punto de oro  en  Ayacucho, al igualar a cero  frente a Inti Gas.

Los  dirigidos  por José del  Solar saltaron al campo de juego del coloso “Ciudad de Cumaná” con el desconcierto de no tener en el once a Carlos Galván  y  Rainer Torres -  ambos con fatiga muscular - y a Pablo Vitti, por decisión técnica señalaron  en Ate. La “U” no era la misma, pero había una camiseta por la que se tenía que matar.Arrancó el partido y como era previsible, los locales se  fueron con todo, con diversos disparos de media distancia de Franco Mendoza y el desborde inquietante por el sector  izquierdo de Julio Landauri.  Sin embargo,  ahí estaba Raúl  Fernández, un fenómeno  que  desde  hace varias fechas  desempolvó la capa de superhéroe e impidió que su valla caiga. Sus números lo dicen, lleva  450’ sin recibir un gol.

En tanto, los merengues intentaban con Fano, Alva y Polo asustar de contra el pórtico de Joel Pinto, que en la primera parte fue un espectador gratuito. Los merengues   sufrían, no tenían una idea de juego definida y los ataques por  parte del cuadro gasífero no cesaban. Había que armar un verdero rompecabezas para la etapa complementaria.

Nunca concretaron

Ya en la etapa complementaria aparecieron con mayor  notoriedad los ¡uff...!, los ¡go...!, y  los ataques cardiacos que dejaron sin respiración a la “Ciudad de las Iglesias”.

A  los  49’, el  veloz Landauri  supera sin  problemas a  Revoredo y sacó un centro que dejó solo a Ángelo Cruzado, quien en  la  línea  del  arco puso el pie cerrando los ojos y  la envió, como un regalo con lazo,  hasta el Monumental. “Chemo” solo atinaba a reírse y a pasar la saliva del pánico.  

Pasaron  cuatro  minutos  y los cremas armaron la contra  después de una jugada de laboratorio que se congeló en la pizarra de Édgar Ospina. Rabanal  para  Polo y este que la manda al  fondo del arco de Joel Pinto. ¡Pum...gooolll!, se escuchó  en  la “Trinchera Norte”, mientras Henry  Gambetta  anulaba la acción.

¿Posición adelantada? Al final, la “U” salió con heridas, algo magullada, pero viva, pues  está  a dos puntos de Cienciano y dejó en claro que pese a los obstáculos  tiene  pasta de campeón.