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¡El “Loco” soy yo!

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Markarián lo había pensado tanto que cuando llegó el momento se rindió ante el calor del partido y dispuso su ingreso a los 59’ por un irregular Yotún.

Ahí estaba el “Loco”, como un toro cubierto de sangre, esperando embestir a cualquier uruguayo que pensara atacarlo. Y es que a despecho de sus kilos de más puso corazón. A los 71’ avisó con un zurdazo, y luego dejó su huella a los 84’, con un “cariñito” para Lugano, recibiendo la tarjeta amarilla.

“Solo se ha conseguido un punto, no hemos ganado nada, porque la idea era el triunfo”, dijo un envalentonado Vargas, quien rescató la entrega del equipo.  “A pesar de todo no perdimos la actitud, me dio bronca no ingresar antes, pero igual jugué unos minutos”, finalizó.

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