Paolo, rey de la Copa

No tiene la magia de Neymar ni la estelar zurda de Messi, pero Paolo atesora -gracias a Dios- el don de transformarse cuando viste la blanquirroja.  

Saca las garras, se eriza y, valgan verdades, no cree en imposibles; a tal punto que la prensa internacional lo ha considerado, con justicia, como la figura de la Copa América por encima del sucesor de Pelé y el discípulo de Maradona, nada menos.

“Me halagan esas comparaciones, pero yo solo quiero seguir demostrando que puedo ser importante en la selección”, responde Guerrero con la misma sobriedad con que vulneró a Muslera y Michel, víctimas de su chimpún derecho en los duelos ante Uruguay y México, respectivamente.

La agencia DPA es contundente y lo resume así:  Ellos (Messi, Neymar) buscan ser los astros del torneo, marcar goles y clasificar a sus equipos a cuartos. De momento no han logrado ninguna de las tres cosas. Guerrero sí.

Luego de la  modestia, el delantero del Hamburgo se levanta, infla el pecho y asegura muy suelto de huesos.

“No he venido por tres partidos, estoy  en  Argentina para jugar la final. Soñar no  cuesta nada, y pienso que debemos seguir adelante, sin ponernos techos ni nada”.

Pese a morderse las uñas y jalarse el cabello, Paolo tendrá que guardar sus botines para el caliente duelo de hoy ante esta Chile que ya lo sufrió  en tres oportunidades.

Sergio Markarián ha sido claro: no quiere  amargas sorpresas (una lesión o una segunda tarjeta  amarilla), y lo reservará  para los cuartos de Final.