¡Apagó el Gas!

Si su regreso impregnado de incógnitas desafiaba hasta cierto punto sus virtudes, ayer Johnnier Montaño se despellejó de las repentinas lesiones y encontró el aire en aquel tragaluz que lo estaba carcomiendo.

A partir de ello, Alianza confirmó, sin opción a la desconfianza ni a las miradas de recelo, que su camino de cara al título está tan sólido como el amor del hincha por su camiseta.

Giros como si tuviera una cintura de bailarín de ballet, los cambios de ritmo como si su corazón bombeara como un motor de Ferrari y sus pases como puñales en el cerebro de los ayacuchanos hacían que el público en Matute se ponga de pie con el “Potón”. Bazán y Hurtado por los extremos le agradecían la faena.

Y es que los íntimos vencieron 4 a 2 a Inti Gas en un cotejo que mostró el poderío de los dirigidos por Miguel Ángel Arrué en los metros finales y una que otra falencia en el fondo.

Al minuto 4, Johnnier ingresó como un alfil y lo dejó mano a mano a Bazán frente a Joel Pinto. “Coco” la mandó al fondo. Era el primero para los blanquiazules.Siete minutos después apareció un centro de Prado con veneno de una serpiente cascabel y Ovelar saltó con las alas de un ángel bendito para que de un certero cabezazo anote .Sin embargo, el Alejandro Villanueva se enmudeció cuando a los 18’ Cruzado aprovechó una salida en falso de Forsyth. El “Blanco” se puso morado de la vergüenza.

Ya en la etapa complementaria a los 52’, Montaño sacaría un sablazo de izquierda para marcar el 3 a 1 momentáneo. El cafetero era la figura. Aunque la alegría duraría poco, ya que a los 76’ Osorio descontaría. Las caras contrariadas desnudaban el difícil momento.Cuando el cotejo llegaba al epílogo de la vida, apareció Óscar Vílchez (88’) para sellar el 4 a 2. Ahora, el pueblo “Grone” sueña, sueña con su engreído –Montaño–, con sus “Potrillos” y con el título.l