Lobo, ¿qué has dicho?

Hay momentos en la vida donde se necesita algo más que un diccionario bajo el brazo para interpretar las moralejas, esas que te van incrustando enseñanzas para captarlas en su tercera repetición, esas que pueden aparecer en los momentos menos oportunos, pues muchas veces las mismas colindan con las impertinencias del destino.

Resulta que ayer el técnico Sergio Markarián visitó las instalaciones del club El Bosque, en Chosica, donde compartió  gratos momentos con los muchachos de la escuela de formación de la Real Federación Española de Fútbol. Profesor, ¿qué opina de Pizarro?, lanzó la primera pregunta uno de los alumnos. “Pizarro es un excelente jugador”, señaló el “Mago”.“Es bueno que diga y comience a decir algunas cosas, justo hablando de Pizarro... en el fútbol peruano, lamentablemente, se han instalado como valores los antivalores”, dijo.

Continuó con la clase y enumeró los valores que debería tener un jugador. “Se debe ser: humilde, honrado y tener respeto, es difícil reunir en una persona todas esas cualidades... hay que cultivarlas con buen humor. Realzar algunas conductas cuando hay una trampita,  sobre todo para ese que sin prepararse mejor logra engañar al técnico”.El “Mago” seguía ajustando  las definiciones de lo bueno y lo malo que hay detrás de un balón. “No está bien ni en el fútbol ni en la vida incitar al árbitro al error,  no está bien. Ganar con esas armas no está bien, para ganar hay que correr más, saltar más, caer y levantarse más rápido, rematar mejor al arco y ser mas hábil”.

Justo ahí compara el penal a Claudio ante Bolivia con el recital presentado. “Si bien es cierto a Pizarro lo tocan, pero él exagera”, cerró la clase.Quiero que se entrene con seriedad y con aplicaicón.