¡Qué miedo!

Las minas yacían vivas en el suelo, de hecho una se activó tras la derrota en el último clásico, pero se vienen nuevas pruebas y Alianza Lima volvió a apertrecharse para afrontar con cara de perro las siete batallas que restan como si fueran los indicados a salvar el Mundo.

Pese a la diferencia generosa de cinco puntos con el Juan Aurich y diez unidades con el León de Huànuco, los íntimos (punteros con 48 puntos), pese al entusiasmo nunca se sintieron finalistas antes de tiempo seguros por la ruta sinuosa que está por venir.

Este sábado los íntimos deberán sortear a un “Ciclón” cuya misión será tumbar mismo palitroque a cada uno de los jugadores íntimos con la fuerza de su soplido. Está claro que en Iquitos siempre son locales por el apoyo de la gente del oriente, pero el CNI quiere salir del grupo de la muerte, así que no será un pan comido.

Lo fuerte será enfrentar a un León que, además de tener el clima de su parte, jugará con el plus de clasificar a los play off. Los números dicen que están muy cerca de lograrlo. Después de jugar con San Martín y Sport Huancayo en casa, Melgar en Arequipa y Boys en casa lo cierran todo. Serán 21 puntos que Alianza los debe jugar con alma corazón y vida.