Me Quito triste

No jugamos bien. Esa es la única verdad que abre paso a una victoria justa del seleccionado Tricolor. Tuvimos un segundo tiempo para el olvido, distante del primer periodo en el que jugamos mucho mejor. Hubo mucho desequilibrio. Resistimos mientras se pudo.

Hasta los 70’, tras ese remate de Méndez. Sin duda, la ausencia de Lobatón complicó la tarea de Retamoso. Solitario quiso cubrir con recorrido apurado para cumplir, pero no pudo porque estratégicamente Rueda puso a espaldas del jugador de Cienciano a Méndez para que explote el espacio que sobraba.

Tal vez el eventual ingreso de Ballón hubiera resultado más efectivo. A los 89’ apareció Benítez para marcar el 2-0.

En el escenario del primer tiempo, Perú jugó mejor. La razón gravita en la presencia de los Pizarro, Farfán, Vargas y Paolo que tuvo a Ecuador más cauto para salir ofensivamente. Coincidentemente cuando se producen los cambios, Ecuador se animó a buscar el gol sabiendo que sus defensores no tenían la carga del primer tiempo.

Hay que reconocerlo, somos demoledores en ataque y solventes defensivamente. Pero cuando el medio sector suelta las marcas todos terminan complicándose. Sobre todo cuando nos toca jugar de visita. Tarea en la que Markarián todavía desaprueba. Se cierra este 2011 con muchas lecciones aprendidas. La Eliminatoria todavía tiene para rato.