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Lo que tu viejo no te contó: El 'Potrillo' Escobar se fue al cielo siendo un ídolo

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En pocos días se cumplirán 24 años de la tragedia del Fokker, donde murió una constelación de estrellas de Alianza Lima. El “Potrillo” Luis Escobar lideraba esa camada de genios. Debutó a los 15 años, pero según cuentan, en verdad tenía 17, pues había sido inscrito en la Municipalidad cuando tenía 2 años.

El apodo de “Potrillo” a Luis Escobar nace con la narración de Elejalder Godos. Un día Pocho Rospigliosi le preguntó al moreno locutor: “¿Y por qué le dices potrillo?”, y Elejalder le respondió: “Es que corre como un potrillo”.Pero el apodo era también en referencia a las tobilleras blancas que siempre usaba, las cuales tenían un parecido a lo que llevan los caballos de carrera. Escobar apuntaba para crack, era rápido, ligero, encarador, goleador.Tenía un dribling endiablado. Un mes y días antes de perecer en el accidente hizo un gol de antología a Universitario. Apenas a los 6 minutos de iniciado el partido, recibió un centro de Espino al corazón del área que lo encontró bien ubicado, se zambulló de palomita para vencer al golero Urquiza. Fue el único gol del partido y se lo dedicó a su DT Marcos Calderón que en ese fecha cumplía 30 años de entrenador.En su corta carrera jugó 14 clásicos y anotó siete goles. Uno de sus partidos más recordados es el que jugó la noche del viernes 21 de noviembre de 1986, donde destiló su magia, hizo dos tantos, humilló a Chávez-Riva y bailó con su quimba a Pedro Requena, Lucho Reyna, Rey Muñoz y hasta el “Loco” Miguel Seminario.El primer gol del “Potrillo” fue a los 53’ de cabeza. Luego vino la anotación del triunfo a los 85’. Esta vez Escobar llegó al área crema con una sorpresiva y veloz entrada para vencer a “Chaveta”. Fue un clásico memorable en el que Alianza Lima ganó 2-1. 

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