0

Sintió la pegada

Únete a nuestro canal de WhatsApp

La reunión que organizó la actual directiva por los 111 años de vida institucional del glorioso club Alianza Lima, fue una lágrima porque los invitados brillaron por su ausencia, digamos como protesta a la mala administración.

Los socios, jugadores del primer equipo, la barra oficial Comando Sur y trabajadores invitados a la ceremonia, nunca llegaron y las mesas vacías eran prueba fehaciente del rechazo hacia el presidente Guillermo Alarcón.

“Cómo vamos a estar en esa reunión si Pocho nos debe cinco meses de sueldo... Mi hija está enferma, tengo que darle medicamentos. ¿Qué quiere? ¿Que robe?”, nos comentó un trabajador desesperado en las afueras de Matute.  

Y así como esta triste historia hay otras cientas. El descontento es general y ayer todos se lo hicieron saber, salvo un puñado de incondicionales que sí tienen el privilegio de cobrar siempre y rezan a la Virgen que nunca se vaya su “presi” querido. 

Libero Impreso

EDICIÓN DIGITAL

EDICIÓN DIGITAL

OFERTAS DE HOY