Ese es mi lugar

Pasea como Pedro por su casa, rodeado de miradas inquisidoras y de la reputación que lo catapulta como el auténtico santo negro que la Universidad urgía canonizar en tiempos de marchas y contramarchas.

La llegada de Johnnier Montaño alegra, inquieta, preocupa. Hay más ojos, más periodistas, más preguntas. Pero el tipo de la colita prominente ni se inmuta. Dice sí y también ¡no! Gambetea a cualquiera que pretenda preguntarle por algo más que fútbol. A ver, con Franco Navarro no puede, tampoco lo intenta.

“Montaño va a jugar este domingo ante Cienciano en el Cusco porque es el único que llega con ritmo”, ha dicho el técnico sin titubear. ¿Y el carné de campo? “Lo tendrá en cuestión de minutos, así que va de todas maneras”, concluyó.El “aroma a café colombiano” ya separó los chimpunes. Pero tendrá que aguardar un poquito para “consagrar” al goleador que eligió: Héber Arriola. El grandote volverá, como sabe, como puede, con todo. “Su regreso me deja satisfecho, llega hoy, pero le tomará una semana recuperarse de una lesión en la rodilla”, firmó Navarro.