Ahora vengo yo: Erick Delgado taparía ante Chile en Tacna

Su presente quizás está condenado por decir las cosas sin anestesia y por creer que nuestra sociedad -en gran parte- ya está preparada para aguantar la frontalidad. Y si a todo ello le sumamos que sus muecas no son la de un ángel y en algunas palabras se le escapa una que otra lluvia de verdad... entendemos porqué Erick Delgado no encuentra el guante a su medida.

Recapitulemos. A los 21 años lo mandaron de vacaciones con Lucifer, lo culparon de la derrota por 2 a 0 ante Chile en Santiago por las Eliminatorias. Sin embargo, él supo pararse frente a cualquier fulano, mengano y sutano para marcar su propia defensa.

Habría que añadirle algunos dimes y diretes que dejó en el camino con personajes, que probablemente, jalonearon su futuro.Pese a ello, hoy en día pocos entienden la ausencia del “Loco” en el arco de la blanquirroja. El guardameta rimense ha demostrado desde hace algunas temporadas y en lo que va de este año que no le corre a la responsabilidad.

“Yo mato por la selección”, siempre dijo. Ponga “+” y recuerde que Sergio Markarián, en su momento, tomó su varita y se la puso en su cabeza, el “uno” siempre respondió. Y es que la personalidad no la compras a la vuelta de la esquina y, duela a quien le duela, no todos nacen con ese galón.Parece que todos esos factores serían el detonante para que el guardapalos cervecero sea tomado en cuenta para el enfrentamiento ante Chile -11 de abril- en Tacna. Cuidado que es probable que tome la camiseta y no la quiera soltar hasta Colombia.

LA VERDAD DEL “MAGO”

De otro lado, el técnico de la blanquirroja, Sergio Markarián, decidió enterrar todos esos rumores que hablaban de su posible salida de la selección. “Si hay gente que me quiere fuera de la selección, me van a tener que echar porque yo no pienso renunciar. No siento que le esté haciendo daño al equipo. Creo en el futuro. Cuando empiece a sentir lo contrario, me iré”, dijo.Asimismo, el estratega bicolor mencionó: “¿Mis errores? Sí, los reconozco, pero prefiero equivocarme antes que quedarme de brazos cruzados y decir ‘no tengo jugadores’. En esa búsqueda algunas cosas no salieron bien”. El tema ahora es la credibilidad.