“Rotos” y descosidos

“Corre la pelota, nunca el jugador”, gritaba hasta el hartazgo Marcelo Bielsa y la memoria chilena se hizo fuerte. Ayer Perú pagó las consecuencias y fue humillado con un 0-3 que deja poco para el optimismo.

El partido confirmó la imagen lamentable de un Perú ridiculizado. La presión chilena ahogó al equipo de Markarián, que en más de una ocasión perdió el balón y puso los -pocos- pelos de punta al “Mago”.

Sobre los 32’, Chile perdonó de manera increíble. Gutiérrez se sacó en velocidad a Butrón, quien parecía dar manotazos de ahogado en su salida, pero la mandó afuera con el arco vacío.

La “Roja” bloqueó a un Perú que apenas le hizo cosquillas con un solitario Yotún.

Al inicio del complemento, Chile pesó más y con el toque peruano en sus botas llegó al gol. Seis toques y Mena la mandó a guardar sobre los 47’.

No fue suficiente. Los de Borghi no desaprovecharon la expulsión insólita de De la Haza (duró apenas 6’ en el campo tras su ingreso) y se atacó sin “roche”. Un tiro al palo de Gutiérrez fue el preludio del 0-2.

La visita maniobró por izquierda y Junior Fernandes, la actual estrella de la “U” de Chile que en 2010 fuera ¡echado!  del Coopsol por ¿bajo rendimiento?, envió un centro que Flores convirtió en gol con el pecho.

Butrón, casi un maniquí en el arco nacional, vio caer por tercera vez su arco tras un centro desde la izquierda que Carrasco clavó de tijera. La pelota se fue al fondo como riéndose de la inferioridad peruana.

Markarián pensó en “el futuro” olvidando el presente y de la tribuna bajó el “¡dan vergüenza!” lapidario. ¿Con los “extranjeros” será otra historia? ¿Hacia dónde vamos? Solo él tendrá la respuesta antes del partido del 3 de junio ante Colombia.