Tremenda broncaza

Casi sobre el minuto 90 y cuando los merengues estaban con la sangre en el ojo por la volteada que les habían metido los santos, estalló el Monumental.

Ximénez, que durante el partido se la pasó reclamando al árbitro, no pudo más con su frustración y le metió una patada por detrás a Cueva. Al ver el hecho, el colombiano Perea se “apadrinó” y le metió un “viaje” al “Chino”.

Allí se desató una batalla campal. Unos metiendo puntapiés y puñetes asolapados, mientras otros intentaban separar a los más furiosos.

Ximénez seguía incontrolable. Fue a buscar a Perea para darle su vuelto. Varios intentaron calmarlo: uno de ellos fue Butrón, quien lejos de lograr su propósito, enfureció aun más al uruguayo, quien le soltó frases irreproducibles. El golero no aguantó los insultos y escupió al ariete crema. Además, Butrón se fue encima de Llontop y en su cara le soltó: “¡Eres un limitado!”.

La bronca no paraba. Galliquio también quería imponer su ley y el “Puma” tuvo un pico a pico con el preparador físico de San Martín: “¡Sé dónde vives, allí te voy a buscar!”, le gritó Carranza. La Rosa, descontrolado,  fue tras la “Muela” Corzo.

Así acabó un partido que se manchó por la culpa de quienes siguen propiciando la violencia sin sentido.