Marcha fúnebre

Con la continuidad de José del Solar en el ojo de la tormenta, el espectro del descenso hoy más que nunca camina en la espalda de todos los hinchas de Universitario. Y es que los merengues cayeron ayer por 3-1 ante Melgar en Arequipa y entraron a un proceso de coma en el campeonato.

Ni el mismísimo “Misti” se apiadó de los de Ate, pues erupcionó en tres momentos. Como si fueran estocadas fatales para la visita y su vida que hoy parece el fuego de una vela.  Ya en el cotejo, el conjunto  “dominó” salió con todo desde el inicio. Tanto es así que a los tres minutos apareció Federico García para marcar el primero de un poderoso cabezazo. Aurelio Saco Vértiz solo le miró el número.

El Monumental de la “Ciudad Blanca” explotaba, mientras los cremas se agarraban el rostro, pateaban su suerte y miraban al cielo en busca de una respuesta a tan terrible momento.Entonces, parece que desde arriba se apiadaron y le dieron la oportunidad de la igualdad. El “Orejón” Édison Flores se puso el escudo en el corazón y de un terrorífico disparo derrotó a Carvallo a los 40’.

Cuando todo tenía tintes de esperanza para la visita, apareció el “Torito” colocando el segundo para los characatos a los 46’. Cerró los ojos y con el alma  mordida lo celebraba con todo el pueblo arequipeño.Para la segunda mitad, las cosas no se modificarían en su proceso. La “U” intentando con lo que tenía y Melgar apelaba a la experiencia de Hilden Salas para controlar el cotejo. Incluso, los rojinegros se impregnaron de toques, tacos y una que otra huacha.

Bajo ese paseo, llegó el tercero. Manuel Contreras apareció a los 83’ para cerrar el telón y con su grito hacerle entender a “Chemo” que todo era una pesadilla en tiempo real.En la “U” se olvidaron de la historia y de ese pasado que hoy se avergüenza de un presente con aroma fúnebre. Por ahora, ya hay una lápida con las iniciales de “Chemo”.