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Caído en combate

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En toda batalla siempre hay heridos y Yoshimar Yotún fue el gran sacrificado de la contienda. El lateral zurdo se inmoló ante la hinchada celeste arriesgando su integridad para permitir la jugada del gol de la victoria, aunque el saldo final apagó su habitual sonrisa.

“Yoshi” metió la pierna como los machos ante el cusqueño Herrera, y pese al dolor no claudicó en su acción para dejar a su equipo a tiro de gol. Tras ello no pudo más y debió ser cambiado, pues una distensión de ligamentos en la rodilla izquierda amenaza con dejarlo fuera de carrera para el lance en Lima, aunque él sabe que su esfuerzo valió la pena.

“Tenía que ir con todo a la jugada, es una final y se juega así, por suerte se logró el gol, aunque el dolor fue insoportable, por eso no celebré, pero cumplí con llegar al fondo para poder ganar”, señaló el rimense.

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