Apoyo total a los sancionados

Continuando con el escándalo de edad adulterada de la selección peruana Sub 20 en el Sudamericano de Uruguay 1979, el hecho no pasó inadvertido para las autoridades peruanas y terminó con la condena de los futbolistas Eduardo Malásquez, Adhemir Arroé y Esteban Falla, quienes pasaron algunos días en la cárcel.

Sin embargo, el rechazo de los colegas y compañeros del medio local no se hizo esperar. Todos los clubes de la liga peruana decidieron apoyar a los jugadores encarcelados sentándose en la mitad del campo durante sus respectivos partidos.

Esta manera de protesta se gestó al considerar injusto el castigo hacia los mencionados futbolistas, ya que la selección chilena fue detenida en el aeropuerto, acusada del mismo delito, pero a las pocas horas sus integrantes fueron liberados sin cargos en su contra.

El primer “sentón” se produjo en el estadio “Lolo” Fernández, durante un encuentro entre Alianza Lima y Deportivo Municipal. Los 22 futbolistas  se fueron aglomerando en el círculo central para luego sentarse en el campo de juego por espacio de dos minutos. Los entrenadores y suplentes también se unieron a la cruzada.

El compadre merengue hizo lo propio en el Julio Lores Colán de Huaral ante el elenco local. Pero esta vez, el hecho se produjo al inicio de la segunda mitad. Otros dos minutos, los jugadores de ambos equipo permanecieron sentados sobre el círculo central.

Al final la presión mediática y la acusasión cayó en saco roto. Nunca más se volvió a hablar en Perú de un fraude de edad, hasta el caso Max Barrios.