¡Fuiste Pacífico!

José Luis Saldaña

La sonrisa con el casi no es completa. No es perfecta. Pierde su magia. Su naturaleza. Su brújula. Y quizá esa fue la expresión de los “potrillos”, que ayer se toparon con la mano bendita de Vegas, con un añejo muro rosado. 

Los dirigidos por Wilmar Valencia se quedaron con las ganas de celebrar por todo lo alto su aniversario 112 e igualaron a cero ante un Pacífico que jugó los 93 minutos con el cuchillo entre los dientes. Con la convicción en el corazón.

Desde el primer minuto Reyna, Guerrero y Bazán intentaron quitarle el bastón a la visita.  ¡Nada! No se desplomaba. Si no era “Chilavegas”, estaba el guaraní Benítez para que de un puntapié, al mismísimo cielo, aleje el peligro de su área. Así de fácil y sanseacabó.

“Rambo”, metros más adelante se sacudía la melena y trataba. Trataba por todos los medios. Tanto que la desesperación lo consumía. Era un espejo de lo que sentía el hincha en las graderías del Alejandro Villanueva.

Porque los dirigidos por Juan Carlos Bazalar hicieron su negocio. Se refugiaron como una tortuga en su caparazón y cuando aparecía una pequeña luz, salían con todo para atacar.

Tanto es así que Heredia en más de una oportunidad tuvo que dejar la vida. Rodilla arriba y los puños al frente para proteger su portería. Cualquier cosa servía para que la sangre no llegue al río.

LOS AÑOS, LOS AÑOS...

La etapa complementaria se disputó bajo el mismo libreto. El conjunto de Villa el Salvador controlando el compromiso a su ritmo, y los íntimos intentando por todos los medios. Trujillo centrando. Un Vidales recién ingresado luchando como condenado y el tiempo que no perdonaba.

Y la sonrisa nunca se dibujó  en su totalidad. Se desvaneció en un “para la próxima”, en un debut discreto en casa, en un garrotazo al alma. “No importa que nos llamen viejos”, dijo Mauro Cantoro. No se equivocó. 

Ayer se comprobó que “más sabe el ‘Diablo’ por viejo que por ‘Diablo’”