LÍBERO te cuenta detalles de la reunión que sostuvo Susana Cuba con el plantel de Alianza Lima

El mal momento que atraviesa Alianza Lima, con sus cuatro derrotas al hilo, obligó a la administradora Susana Cuba a dejar su confortable oficina de Matute para asistir a los entrenamientos y conocer, en la voz de los propios protagonistas, las razones que desviaron al equipo de la ruta de los triunfos.

Susana acudió temprano al complejo Esther Grande de Bentín, en Lurín, y luego de conversar con los jugadores habría llegado a la conclusión de que se romperán el alma en la cancha por el club que tanto aman e idolatran.  

En 40 minutos de charla, les pidió un poco más de entrega, pero los motivó a continuar mejorando en el campo de juego. Pero no solo fue eso. Susana Cuba escuchó otras voces expertas que hablaban de los errores de “Bam Bam” Valencia al momento de armar sus equipos, tema que luego enfrentó cara a cara con el entrenador, a quien le dio un tibio respaldo.

A SALIR DE LA CRISIS

Esa es la realidad. Por un lado, los jugadores refuerzan compromisos para ganar por la institución y, por el otro, un técnico necesitado de triunfos para seguir con vida en La Victoria.

“Todos los equipos pasan por rachas de juego negativas y lo importante es saber resolverlos con rapidez y unidad”, dijo Susana Cuba en la web oficial de la institución victoriana.

Mañana, Alianza Lima chocará con el embalado Juan Aurich en el estadio Elías Aguirre de Chiclayo y una quinta derrota sería la “tumba” de Valencia. Es que así sea hijo del club, ningún técnico soporta cinco “bombazos”. ¿O sí?