Soroche con roche

José Torres

Un terrible mal de altura afectó a los cremas en Urcos. A más de tres mil metros sobre el nivel del mar, la “U” perdió el oxígeno que lo mantenía sonriente en la cima y cayó por 2-1 mostrando su lado más endeble a manos de un guerrero cusqueño que lucha por hacer Real ese sueño de campeón.

Comizzo y compañía fueron víctimas del terrible soroche. Y es que parece que la altura les viene mal y ese vértigo que les producía mirar a sus rivales desde una ubicación elevada los hizo precipitarse hacia una caída libre que dolió en el alma.

En solo unos días Universitario cambió el cielo por el infierno, derrumbando ese castillo de ilusiones cimentado en su imbatibilidad fuera de la capital. Dos derrotas consecutivas como visitante magullaron la alegría de medio país y transformaron la dicha en lamento.

La historia arrancó con pie derecho para la “U”, con un gol tempranero de la “Pulga” Ruidíaz a los 18’ sombreando el balón ante la salida del “Pipa” Carranza. La ventaja hacía presagiar que el poderío merengue lejos de sus dominios volvía a manifestarse, pero nada estaba más lejano de la realidad.

Bien dicen que los jóvenes ganan partidos y los “viejos” logran campeonatos, por eso la inexperiencia de los cremas permitió la reacción de Garcilaso, un serio candidato al título. La felicidad merengue fue escasa ya que sobre los 22’ Lojas de golpe de cabeza instaló el empate. La “Máquina celeste” se afinó y a los 46’ el paraguayo Ferreira dio vuelta al marcador con un buen remate rasante.

La punta cambió de color, dejó el crema para teñirse de celeste y ni los tardíos cambios de Comizzo para el segundo tiempo alteraron el curso de una historia Real.