“Pensé dejar el fútbol por la muerte de mis padres”

José Torres Orellana

El 2009 la fatalidad tocó la puerta de la familia Arismendi. Un episodio trágico acabó con la vida de los padres del buen Jesús, quien debió ver su vida transformada en un drama que enmarcó las páginas policiales.

Su padre, don Jesús, asesinó de un balazo a su madre, doña Zoila Milder, y luego se suicidó. La noticia devastó al futbolista, quien a duras penas logró reponerse y hoy parece volver a sonreír en un presente muy distinto. El defensa de UTC, casado y con una hija, es todo un ejemplo de superación en el fútbol.

¿Aún quedan huellas profundas de lo que ocurrió con tus padres?Sí, fueron momentos muy duros, por la forma cómo se dio la muerte de mis padres, no fue una muerte normal, es difícil comprenderlo, pero tuve la fuerza para salir adelante.

¿Cómo lograste reponerte a tanto dolor?Me refugié en el fútbol, no me derrumbé y seguí jugando. Me prometí que quería tener una familia y lo logré, ya tengo dos años de casado y una hija linda que ilumina mi camino.

¿Era posible pensar en fútbol en esos momentos?No, era imposible, estaba en un estado anímico complicado por eso pensé en dejarlo porque no tenía la concentración necesaria para jugar, pero fui fuerte y pude mantenerme.

¿Ya asimilaste el dolor?No, aún no lo asimilo, los extraño mucho, pero ya estoy más tranquilo gracias a mi familia. Tengo el apoyo de mi esposa que siempre está ahí, pero cuando hay momentos tristes sufro mucho porque no hay a quién contarle lo que me pasa.

¿Qué es lo que más recuerdas de ellos?Los consejos que me daban, sobre todo a mi padre. Sé que lo que hizo estuvo mal, pero no soy quién para juzgarlo, ya lo perdoné y los extraño y recuerdo todos los días.

¿Qué fue de tu hermanita? Debiste ser su fortaleza en ese momento...Es verdad, debía ser fuerte por ella. Mi hermana es dos años menor que yo, y para ella era más difícil. Me costó mucho ayudarla, pero salimos adelante. Ella es una profesional ahora y siempre nos apoyamos los dos. Estamos solos los dos en el mundo y debemos velar el uno por el otro como seguro querían nuestros padres.

¿Qué personas en el fútbol fueron importantes en ese momento tan difícil?Todos mis compañeros en Melgar me apoyaron mucho. Varios técnicos, sobre todo Claudio Techera que nos dirigía en ese entonces, sus consejos fueron claves para que no me derrumbe.

¿Y compañeros del fútbol?Ysrael Zúñiga y Jean Ferrari fueron los que más me dieron la mano en ese momento. Los dos me apoyaron mucho y me hablaron duro para que siga en esto y no me dé por vencido tan fácil.

Tu presente ahora es distinto...Es cierto, estoy volviendo a ser feliz. Paso una etapa buena en UTC donde las cosas me están saliendo bien. Tenemos un grupo bueno, con muchas aspiraciones y queremos llegar lejos.

Les tocó estar en el grupo de la “U” y son los únicos que pueden darle caza...La pelea será dura, la “U” es un buen equipo pero confiamos en alcanzarlos, solo estamos a unos puntos de ventaja y podemos dar la sorpresa. El equipo ya agarró forma y solo es cuestión de mantener la regularidad hasta el final.