BenÍtez El “Mago” que hará jugar a los “potrillos”

La radiografía que llegó a manos de Guillermo Sanguinetti determinó que Alianza Lima sufrió a lo largo de la temporada de la prolija elaboración de “los que saben un poquito más” y del puntillazo como corolario del esfuerzo, punto que también generó cierto dolor de cabeza.

Por ello, el “Topo” solicitó como medida de urgencia la contratación de dos jugadores foráneos con perfil ofensivo. Es decir, que no perdonen ni a la mamita en el área. Ellos serían el volante mixto argentino Rodrigo “Churro” Soria y el uruguayo Diego “Mago” Benítez, que podría desempeñarse de acuerdo a las necesidades como enganche o segundo delantero.

De Soria se dijo aquí que por sus características de juego, o sea combativo y dinámico, tendría que resolver los problemas de la creación, del toma y dame que alguien debe dirigir desde la zona media. El volante del Cúcuta cafetero la conoce.

Benítez en cambio es un elemento que desde tres cuartos de cancha hacia adelante es el arma mortal que desearía todo entrenador. La pisa, la esconde, la vuelve a mostrar para dar el pase o meter el fierrazo.

Hincha acérrimo de Peñarol, Benítez jugó en su país por  Colonia y Defensor. Emigró al Dínamo de Bucarest, pero en Ecuador hace historia al ser parte del ascenso con Técnico Universitario, donde jugó 15 partidos y marcó 5 goles. Hoy es el guía del CD U. Católica que pelea un torneo internacional.

En el 2008, Sanguinetti al frente de Gimnasia y Esgrima de La Plata usaba el sistema 4-4-2 o 4-4-1. En el 2014 en Alianza Lima tendría un equipo que se “ajuste” a ellos. Benítez en dicho dibujo sería el segundo ariete o el extremo.