En el año de tu centenario

La diferencia con otras religiones, es que aquí nadie impone nada. Aquí el único pecado es amar tanto, desvivirse por esa camiseta crema que está grabada en la piel. Ese es el camino más simple para ser feliz. Si alguien dice lo contrario, no ha vivido.

Pero nada se lograría sin ese impulso divino que llega desde el más allá. En Ate si hay algo que no se discute es la veneración a  “Lolo”. A aquel cañonero que ya está en estampita, que tiene su imagen grabada en una banderola inmensa de Norte.

EN TU HONOR

Por ello, en este año que se cumplieron cien años de su nacimiento, el primer equipo no tuvo mejor idea que rendirle homenaje con el título. Y lo hicieron al mejor estilo de la “U”: sufriendo, arañando todo, sintiendo que uno solo seguía de pie por los latidos del corazón.

“‘Lolo’, ‘Lolo’”, gritaron con la garganta despellejada los muchachos que inundaron las graderías en el play off ante Garcilaso. Más de uno tuvo claro que el máximo ídolo de los merengues estuvo con ellos en todo el año.

Porque no hay otra explicación. Le prestó el botín derecho a Néstor Duarte en el últimopenal ante la “Máquina Celeste”, designó que el “Chapu” marque en las dos primeras finales. Claro, el “Chapu”, alguien con su apellido.

“LOLO” VIVE

Colocó su dedo sobre la suerte de Raúl Ruidíaz, quien se transformó en el hombre gol de los dirigidos por Ángel Comizzo. La “Pulga” todo lo vio arco y redes. Anotó 21 tantos. Notable lo del menudo atacante.

Otros detalles fueron las “micas”. La marca Umbro sacó un modelo de colección para los fanáticos. Estilo “retro”, como para que nadie olvide al hombre de la mítica redecilla en la cabeza. La rompieron en ventas.

Además dicen que sobre el final del torneo, Fernández le prestó sus manos a Carvallo. De otra manera no hubiera existido explicación a tanta magia, a tanta perfección. Todo esto es producto de la fe, de ese sentimiento que inunda el pecho de los de Ate. La estrella 26 la dibujó “Lolo” en el cielo y lo celebramos todos en la tierra.•