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Te me caíste, otra vez...

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El “Puma” tendrá que rectificar su emblemática frase. Y es que esta “U” no es la “U”. De aquel equipo campeón de funcionamiento sobresaliente no queda ni la sombra. El ADN del ídolo merengue en la camiseta no basta para encontrar el rumbo.

Y lo sufre en la Copa y también en el Torneo del Inca, donde empezó con pie izquierdo, arrastrando esas dudas que invaden desde el inicio de la temporada y las que César Vallejo se encargó de desnudar sin hacer mucho esfuerzo.

La experiencia del elenco trujillano hizo añicos ese ímpetu de los chibolos cremas. No basta correr y sudar sin razón, hay que generar, pero de eso poco o nada se ve en la versión 2014 del cuadro estudiantil.

La balanza se inclinó a los 15’ cuando el panameño Luis Tejada convirtió el penal que Saco Vértiz  cometió infantilmente a  Requena. De ahí en más los norteños dominaron a su antojo el  partido y hasta se dieron el lujo de fallarse otro penal. El “Matador” no pudo vencer la resistencia de Carvallo y animó a la “U”, pero eso no alcanzó.

Universitario se quedó con 10 hombres por la expulsión de Olascuaga y la cosa se puso más difícil. A los 52’ Ruidíaz tuvo el empate en sus pies por un penal, pero su disparo se estrelló en el palo. Estaba claro que no era la noche crema.

Vallejo tuvo un sinfín de ocasiones para ampliar su ventaja, pero se apiadaron del dolor merengue y fallaron todas. “Hay golpes en la vida...”, y Comizzo los padece sin piedad. 

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