¡Nos sentó!

La ilusión se esfumó en un santiamén, la esperanza se derrumbó como un castillo de arena: Marcelo Bielsa, el “Loco”, decidió no aceptar la propuesta de la FPF para ser el nuevo entrenador de la selección nacional de fútbol.

“Quisiera comunicarle que he decidido no aceptar la proposición que me hiciera, vinculada con la posibilidad de asumir la dirección técnica de la selección peruana de fútbol. Lamento sinceramente no poder asumir el desafío profesional que me propone. He demorado mi respuesta porque no me resultó sencillo tomar esta decisión”, dijo Bielsa a través de un comunicado dirigido a la Federación.

Luego agregó: “Mi gratitud hacia todos aquellos que se han manifestado a favor de que yo trabaje en su país”, refirió el técnico argentino. Punto final para una ilusión que alteró la emoción del país futbolero que veía en Bielsa como el salvador de nuestro atribulado fútbol.

La negativa de Bielsa no tiene nada que ver con el tema económico, pasa más por otros factores.

Conocida la decisión de Bielsa, la FPF no tuvo que mover mucho sus fichas, pues manejaba un plan “B”, que era la posibilidad de concretar lo de Pablo Bengoechea, algo que finalmente se consolidó.