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El camino para estirar la paternidad blanquiazul está marcado. Garcilaso confirmó su intención de llegar a Matute con un equipo alterno y le dejó la mesa servida para que Alianza prolongue su supremacía contra los cusqueños jugando en casa.

Los celestes priorizan sus aspiraciones en la Copa y ya que su pataleta por la programación del partido no dio frutos, guardarán bajo siete llaves a sus principales figuras. Y aunque esto no garantiza el triunfo, sin duda, jugar contra un Garcilaso diezmado le da mayores chances de victoria al equipo de Sanguinetti, quien no tendrá compasión y mandará al ruedo a sus más feroces fieras para continuar por el sendero del triunfo en el Torneo del Inca.

Sin embargo, el registro de cotejos entre ambos equipos en el fortín íntimo dan cuenta de la absoluta superioridad de los aliancistas contra los imperiales, quienes desde su ingreso a primera división solo han padecido derrotas en Matute.

Las cuatro veces que los grones recibieron al equipo de “Petróleo” en casa, salieron airosos, así los cusqueños se presentaran con su mejor elenco. La casa se respeta y esta vez no será la excepción. “Siempre nos fue bien contra Garcilaso”, afirmó el “Colo” Ibáñez.

La hinchada espera el festejo y Guevgeozián, Costa y Aguirre tienen la obligación de alegrar a medio país

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