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Voló la “Cotorra”

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Gabriel Costa y Julio Landauri construyeron un castillo sobre el sector izquierdo, con paciencia, con pases cortos, pases que iban abriendo la defensa de Sport Huancayo. Entonces, ‘Tití’ levantó la cabeza y sacó un centro con veneno entre esa línea delgada del área chica y grande...algo había observado.

Corría el minuto 52 y Alianza Lima ganaba 1-0, sin embargo, era momento de asegurar el compromiso. No son tiempos de arriesgar nada. El que entró con todo, como un gladiador adolorido por tanto panorama adverso, fue Pablo Míguez. Cabezazo que dejó sin opciones  a Joel Pinto.

Grito de luchador, desgarrador, reflejando lo que el hincha guardaba en la garganta. De las entrañas. Los compañeros lo abrazaron, reflejando lo que es Alianza Lima, una familia, más allá del  dolor que se siente.

BIEN EN LA MARCA

Más allá de eso, Míguez demostró que no solo cumple en cancha contraria sino en su propio terreno. Se paró como un soldado en la primera línea de volantes junto a Josimar Atoche.

Míguez vive sus mejores días en Matute.

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