Tres días después de romperse el tendón, a Roberto Ovelar todavía se le vio caminando por Matute, tenía la recomendación diaria del médico de operarse pronto, pero dado el desinterés de la dirigencia el “Búfalo” prácticamente no sabía qué hacer.
Ayer el “Búfalo” acudió al club y se reunió con el comando técnico para despedirse y explicarle el motivo de su demora para entrar a sala de operaciones. Después, en charla con la prensa, el paraguayo comentó que, otorgado el visto bueno del club mexicano Cruz Azul, dueño de su pase, “vamos a ver dónde me opero”.Horas más tarde, Ovelar tomaría el avión con destino a Buenos Aires, Argentina, para ser intervenido quirúrgicamente. El FIFA Osvaldo Daniel Ocampo, su representante, lo acompañaría en todo momento .
Con vínculo en Alianza hasta finales de agosto, el artillero debe retornar al país para realizar la terapia física hasta quedar a punto. La intención de la dirigencia es renovarle hasta diciembre, pero –con todo lo que vivió el paraguayo hasta hoy– puede ocurrir cualquier cosa.