Cuando el jugador del Guarany se iba solo al arco rival, no tenía ni idea de cómo terminaría la jugada. El remate iba directo al arco, pero ahí estaba el recogebolas para evitar el gol.
Lo increíble de del asunto fue que el recogebolas del equipo contrario se metió al campo y evito el inminente gol del empate.
Al final, ganó el Sergipe por 0-1, pues jugó en calidad de visita.