En la prórroga, el Chelsea salió mucho más ofensivo que lo que se había mostrado en los noventa minutos pero, en el minuto 93, el Bayern tuvo una gran ocasión de irse en ventaja por un penalti que se produjo por una falta de Drogba contra Ribery.
El penalti, sin embargo, terminó favoreciendo a Chelsea, sicológicamente porque Cech paró el disparo de Arjen Robben y además porque Ribery tuvo que dejar el campo lesionado.