Louis Nicollin, fundador y presidente del modesto Montpellier que se proclamó campeón de Francia por primera vez en su historia, apareció en un programa de televisión con un corte de cabello muy peculiar: con cresta y teñido con los colores del club.
Y es que “Loulou”, empresario de 68 años, había prometido que si su equipo se alzaba con el título cambiaría de ‘look’ y como todo un caballero cumplió con su palabra.
Es más, ahora ha señalado que "Si ganamos la Liga de Campeones el año que viene, me lo afeito todo".