Luego de un informe de un medio brasileño, el objetivo de los hinchas del Corinthians no era el peruano Paolo Guerrero sino los jugadores Pato y Emerson a quienes buscaban "romperles las piernas".
Tras la confirmación del presidente del Corinthinas, Mário Gobbi, que el único agredido en la invasión de hinchas corintianos durante los entrenamientos del sábado fue el peruano Paolo Guerrero (quien fue estrangulado), una investigación del diario "O Estado de S. Paulo", llegó a la información que el objetivo de los barristas del “timao” eran los jugadores Alexander Pato y Emerson Sheik a quienes querían romperles las piernas.
Por el momento, los entrenamientos del Corinthians vienen siendo custodiados por efectivos policiales para evitar otra invasión de hinchas del “timao”.