Una verdadera algarabía y locura vivió el estadio Vasil, su equipo el Ludogorets hizo historia al clasificar de una manera espectacular a la fase de grupos de la Champions League. La indiscutida figura del partido fue su jugador Cosmin Motín quien se puso los guantes y atajó dos penales.
El pánico de avivó en el tiempo de descuento de la prorroga cuando el portero del elenco búlgaro salió expulsado en un momento caliente y trascendental porque los penales se venían, sin embargo el defensor de su equipo Motín agarró los guantes y se llenó de valor.
El zaguero fue la estrella al marcar un gol desde los doce pasos y atajando dos penales con lo cuela corrió a abrazar a la hinchada quien lo llenó de abrazos pues eran conscientes de lo logrado en su estadio.
EL DATOEl Ludogorets conocerá mañana en que grupo será ubicado y que rivales tendrá en el sorteo que se dará en Mónaco.