Real Madrid comenzó a ser un club popular a nivel mundial en la primera década del Siglo XXI, cuando Florentino Pérez hizo realidad lo impensado: juntar a los mejores jugadores de fútbol del planeta en un solo equipo de gala, cuadro que el mundo bautizó como los 'galácticos'.
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Además de Zinedine Zidane, David Beckham, Luis Figo y Ronaldo, el presidente del club 'merengue' fichó otros elementos que iban a servir como complemento para ganarlo todo a nivel deportivo. A comienzos del 2006, se confirma la incorporación de Cicinho, un lateral derecho que venía de romperla en diferentes equipos de Brasil y que otros gigantes de Europa estaban tras sus pasos.
Pese a que el 'garoto' llegó con un cartel importante al Real Madrid, este no cumpliría con las expectativas, como sucedió con la mayoría que formaron parte de ese equipo de ensueño a nivel de marketing, pero que en lo deportivo quedó en deuda.
En 2007 sería traspasado a la AS Roma y desde entonces su carrera fue en franco descenso, hasta su retirada deportiva jugando por el Sivasspor de Turquía en 2016.
Cicinho tenía problemas con el alcohol desde la pubertad, situación que el mismo confiesa al asegurar que se dedicó a la bebida durante casi 20 años.
"Comencé a beber con 13 para 14 años, cuando fui para el Botafogo de Ribeirao Preto. Me dijeron que la cerveza era buena y bebí. Todo comenzó con el primer trago y no paré hasta los 30 años. Casi 20 años bebiendo", contó.
"Vi a Jesucristo después de tomar 18 caipirinhas y 14 cervezas", dijo también durante una entrevista, donde también confirmó que hace siete años es abstemio.
Tras haber superado sus problemas con el alcohol y luego de su retirada deportiva, Cicinho se dedicó a ser comentarista deportivo en la cadena SBT, donde es panelista del programa Arena SBT.