Buscaron maquillar la realidad y la incomodidad de todo un plantel que desde hace unos días se sentía engañado y dispuesto a todo. Y es que a estas alturas el triste cuento y el intérprete de las supuestas fumigaciones ya había desaparecido.
La historia es la siguiente. Dos meses de deuda al primer equipo íntimo (un total de 640 mil dólares), una secuencia de mecidas y constantes mentiras que venían acumulando la sangre en el ojo de cada jugador blanquiazul.Ante dicha payasada de algunos señores de saco y corbata de la dirigencia aliancista, los victorianos decidieron no entrenar ayer por la tarde.
LÍBERO pudo conocer que el presidente, Guillermo Alarcón, se reunió por la noche con la Comisión de Fútbol del club aliancista, pues resulta que el viaje a Tarapoto estaría en peligro.Hasta el cierre de la edición no se determinó si es que hoy por la mañana los dirigidos por Gustavo Costas volverían a los trabajos. ¿Aguantará el estratega argentino esta nueva patinada de “Pocho”?