Respondió con hidalguía al llamado del sabio. Diego Penny demostró ayer ante Túnez que el arco bicolor tiene dueño.
Con seguridad en cada paso, el “Flaco” respondió a la confianza del técnico Markarián como nuevo “1” de la bicolor.En cada llegada del cuadro rival, en cada remate, Penny siempre se mostró altivo y firme para asegurar su valla.
Loable labor que, incluso, previo al gol de Túnez, en el minuto 44, su cuerpo con la inercia de un recio guerrero atinó a lanzarse de rodillas para esquivar el balón. Nunca lloró, siempre luchó.