La “U” vaya donde vaya mueve pasiones y ayer ocho buses, repletos de hinchas, llegaron al norte chico para alentar al equipo
Sin embargo, se armó el “chongo” al encontrar las entradas populares a 35 soles. Aquello provocó que los barristas merengues destrocen el portón del Segundo Aranda y se enfrenten con la policía, que utilizó bombas lacrimógenas como represalia.
El partido de reservas fue suspendido porque los jugadores fueron afectados por el gas. Había menos de 60 policías y tan solo 15 efectivos de seguridad privada.