Tras sortear mil cosas que se dijeron de él en la semana, Diego Guastavino le calló la boca a sus detractores en solo unos minutos que estuvo en el campo.
Respaldado por la confianza que le brindó la directiva al confirmar su continuidad, “Messi” hizo de las suyas y contribuyó a la victoria merengue con un pase de gol a Chirinos para sellar la escandalosa goleada.