Sin embargo, dicho coloso no puede darse el lujo de recibir solo a la selección. Los costos de mantenimiento son enormes y el Estado no provee dinero. El IPD debe buscar recursos para este fin y por ello lo alquila para espectáculos no deportivos. El José Diaz no es el único estadio del mundo que alberga conciertos y son estos eventos los que mejor dinero dejan.
Así como es entendible la posición de la FPF de querer un gramado impecable, también es comprensible la posición del IPD. Y en el dilema de la cancha del Estadio Nacional lo más recomendable es sentarse a conversar y llegar a acuerdos. Que no quede en el hincha la sensación de que se busca un pretexto para, a futuro, justificar un mal resultado ante Bolivia por las Eliminatorias.